lunes, 5 de enero de 2015

Los sin gloria

Se han jugado vidas reales, y ese juego macabro decidió sobre su libertad, su desgracia, pero sobre todo sobre su destino.
Personas que pertenecen a esos millones de existencias destinadas a no dejar rastro.
En sus desgracias , amores y pasiones hay un tono gris y ordinario.
Todo lo referente a estos hombres y mujeres se reduce a lo que se dice de ellos; Nada
Al no haber sido nadie.
Vidas que son como si no hubiesen existido, vidas que sobreviven gracias a la colisión con el poder que no ha querido aniquilarlas o borrarlas de un plumazo.
Vidas que vuelven una y otra vez reducidas a la última expresión.
Vidas hasta tal punto paralelas que nadie las puede ya reunir.
Las paralelas, están hechas para unirse al infinito, habría que encontrar la estela resplandeciente que han dejado mientras se precipitan hacia una oscuridad donde " aquello no se cuenta más " y donde todo "renombre"esta perdido.
Vidas reales atravesadas por fragmentos de discursos que arrastran fragmentos de una realidad de la que forman parte,
Las breves y estridentes palabras que van y vienen entre el poder y esas existencias insustanciales, el pequeño brillo que les permitió atravesar el tiempo y situarse ante nosotros como un breve relámpago.
Nace una nueva puesta en escena de la vida diaria.
Todas estas cosas que constituyen lo ordinario, el detalle sin importancia, la oscuridad. los días sin gloria, la vida común, donde lo menor deja de pertenecer al silencio.

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